¡Hola! Hoy, como iniciativa de The Blue Readers, os traigo un par de relatos relacionados con el otoño, que era el objetivo de este mes. El primer relato lo he escrito junto a Carmen del blog Las Letras de Carmen (que si no la seguís en su blog, no sé a qué esperáis) que es el que encontraréis en esta entrada, y el segundo lo he escrito individualmente tomando el principio del primer relato y lo subiré en una posterior entrada AQUÍ. Os agradecería muchísimo que leyeráis hasta el final los dos relatos y que me dierás vuestras opiniones, siempre que sean críticas constructivas. Muchas gracias de antemano :)
PRIMER RELATO
La hojarasca se eleva del
pavimento y forma un vaivén delante de mis ojos. Las nubes auguran tormenta, y
van a empañar los cristales próximos de mi odio. Un suave albedrío aparece,
provocado por las armonizadas gotas de lluvia, que caen del cielo al mismo
ritmo y compás.
Quedaban cinco tristes minutos
para que pasase el tren de las 7:35am, estaba nerviosa. Ansiosa. También
alterada. Y no sabía por qué. Llevaba un año preparándome para ello. Supongo
que es cosa del directo. Todo era muy sencillo; tenía que meterme en la
locomotora, hacer transbordo en la estación de Windey, bajarme en la estación de Tolenday y
depositar la mochila en la papelera del pasillo A3 de la estación, cerca de la
entrada.
Estaba empezando a llover y mis
nervios aumentaban al ritmo de la lluvia. La gente me escrutaba, evaluándome
con sus miradas de superioridad. Siempre superiores a las demás razas. Llegué a
Windey, estuve a punto de renunciar la misión. Tenía cierto resquemor. Pero era
demasiado tarde. Mis compañeros se estaban aproximando a su destino y no les
podía fallar en ese momento. Habíamos quedado en depositar las mochilas a las
8:30am, cada uno en un punto diferente de Tolenday.
Eran las 8:15am, repasé
mentalmente el plan “pasillo A3, cerca de
la entrada…”. Después de una extenuante caminata llegué al pasillo A3,
mandé un mensaje a mis compañeros. Ellos ya estaban listos. Me acerqué a la
papelera para colocar la mochila cuando de repente un guardia de seguridad
preguntó si iba todo bien. No había nadie, solo él y yo. No lo pensé un
momento, saqué la pistola y disparé. Perforé su corazón. Posteriormente, metí
la mochila en la papelera y activé la bomba…3…2…1
Nuestros estilos son tan diferentes pero quedan tan bien mezclados. Ha sido un placer hacer este reto contigo, compañero! Gracias por enseñarme tanto.
ResponderEliminarUn beso! #Carmalex
¡El placer es mío después de haber escrito contigo! Gracias a ti por esta maravillosa experiencia. Espero que en un futuro tengamos más proyectos en común.
Eliminar¡Un beso!
Hola! Que buena historia chicos! Me gusto mucho. Con Flor estamos tratando de ponernos de acuerdo un día para hacer el reto jaja. Deberían hacer algo mas grande justos, yo lo leería :D
ResponderEliminarBesos.